miércoles, 15 de octubre de 2014

TERRORES NOCTUROS. (QUIERO DORMIR II PARTE)

Hace tiempo os escribí que quería dormir. Echaba en falta las largas jornadas de sueño que me pegaba de embarazada, 8 y 10 horas durmiendo, aparte de una siesta al mediodía. Pero nació mi peque y... todo eso se acabó.


Por suerte todo lo malo se acaba un día y no sé cuándo fue pero al final empezamos a dormir genial. La acostábamos a las 20-21, según el día, y... hasta las 7 am del día siguiente!  Que gozada. Eso sí, el día que por lo que fuera se iba a dormir más tarde, es decir las 23h porqué estaba excitada por haber visto a los primos, Papa Noel o quien fuera,... su reloj biológico sonaba otra vez a las 7am. Pero no nos podíamos quejar.

Alguna noche, no lo voy a negar, se despertaba alrededor de las 2am (otros días con menos suerte a las 6am y ya no había quien la durmiera). Pero bueno, mientras fue pequeña, le enchufaba el "pete" para que se calmara y ya el último año, lo que hago es, con el piloto automático, ir a verla, darle un besito y 30 segundos después... se queda de nuevo frita.

Y así hemos vivido los últimos meses hasta que... llegaron los terrores nocturnos.

Este verano tuvimos un día una reunión con su nueva tutora para P-3 y recuerdo que nos preguntó: ¿y cómo van los terrores nocturnos? Y nosotros ¿terrores nocturnos? ¿Qué es eso??? . Si me lo hubieran preguntado ahora otro gallo cantaría.

Empezó un día diciendo tonterías, que había un cocodrilo en casa. Pasamos, no le hicimos caso. La verdad es que le encantan los cocodrilos desde que vio Peter Pan y hasta tiene uno de juguete. En el zoo, también se emociona viéndolos.

Luego empezó que había un monstruo. ¿Pero peque, tu sabes lo que es un monstruo?

Pensábamos que eran excusas para no dormir sola pero tras verla varias noches temblando en su cama de madrugada... decidimos tomar cartas en el asunto.

Pregunté a otros padres con niños algo mayores (gracies Benji!) y nos recomendaron coger material en la biblioteca en la que salieran, como no, monstruos. Así vería que no eran tan malos...  Nosotros hemos cogido varios libros y películas, como por ejemplo "Donde viven los monstruos" o la peli "Monstruos SA".

El resultado, pues todavía estamos en ello pero parece aceptar que en casa no hay monstruos. A nosotros, el libro que al final nos ha funcionado más ha sido "Hay un cocodrilo debajo de mi cama". El argumento es fácil: hay un cocodrilo debajo de la cama y el niño tiene miedo de quedarse a solas con él. Un día se le ocurre hacer un rastro de comida desde el garaje hasta su cama y así el cocodrilo por fin abandona la cama para... dormir en el coche de papa. No hace falta que os diga que le dije a mi hija que ni se le ocurriera hacer un camino con lacasitos para el cocodrilo....

Una de mis amigas, prefirió ponerle al niño Monstruos SA, pero no llegaron a acabar la película y encima  ha conseguido que las pesadillas sean peores. No soporta al monstruo azul bonachón, jejeje.

En fin, que esto es una etapa más y seguro que la superaran solitos pero si nos reclaman, ¿por qué no hacerles compañía un ratito? Así como somos mayoría, seguro que el monstruo no se atreverá a atacarnos de noche.


Feliz día! 

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