CON PEQUES A LA BIBLIOTECA

Me encanta leer y como no, he traspasado mi amor por los libros a mi hija. Llevarla a la biblioteca un sábado por la mañana es para ella una gran alegría, además de una buena alternativa a los días de lluvia.

La primera vez que entró debía tener una semana o así. Recuerdo llevarla en su mochilita dormida. Pero al entrar allí dentro y notar tanto silencio, se despertó y se puso a llorar a pleno pulmón. Que vergüenza, jejeje. Tuvimos que salir corriendo.

Después vino la época de llevarla a escuchar cuentos al espacio reservado para menores de 3 años. Allí veías que los que escuchaban eran los hermanos mayores porque los demás niños, se dedicaban a gatear por todas partes y a coger los objetos musicales que llevaban las monitoras para acompañar el cuento.

Cuando ya pude razonar con ella, me fue difícil hacerle entender que allí se debía hablar flojito y siempre me hacía lo mismo para hacerme enfadar. "QUE DIUS??, QUE PARLI FLUIXET?? (Chillando: que dices, que hable flojito??). Y a mí me salían todos los colores mientras ella salía disparada corriendo por los pasillos y yo detrás con el carrito.

En esta época solo me atrevía a entrar si ella estaba completamente dormida por miedo a pasar vergüenza y molestar a la gente que estaba estudiando.

Pero por fin, con 4 añitos ya ha entendido que cuando traspasamos la puerta, entramos en un mundo de silencios y se pone el dedito en los labios diciendo "shhhhh, ara s´ha d´estar calladeta" (ahora se ha de estar calladita). Eso no implica que a veces se ponga otra vez a correr por los pasillos porque ver tantos libros juntos la vuelve loca (y eso que todavía no sabe leer) pero bueno, hemos mejorado bastante.

Ahora lo que le gusta es escoger el cuento del día, llevarlo al mostrador y enseñar su carnet. A veces nos llevamos más de uno. Ayer concretamente, 3 de temática de navidad.

Lo que llevamos peor es el día que los hemos de devolver. Hay muchos lloros porque dice que son suyos. No sirve que le digas que le van a dar otro y ya nos ha pasado en alguna ocasión que nos hayan de abrir el buzón de fuera para devolvernos el libro que hemos devuelto. Pero en fin, todo llegará.

Feliz día!