miércoles, 6 de junio de 2012

LA HORA DEL BAÑO: BUSCANDO BAÑERA

En las clases de pre-parto tuvimos un día una sesión con una enfermera de pediatría muy maja. Entre las muchas cosas que nos contó, nos explicó que a los bebes les encanta el agua y bañarse en general porqué, al fin y al cabo, se han pasado toda su existencia hasta el momento de nacer envueltos en líquido.

Llega el momento de la verdad: estamos a casa con nuestro retoño, por fin se le cae el cordón umbilical y eso significa que ya lo podemos poner en remojo. Con la ilusión que nos hace estrenar la bañerita, jugar con los patitos... Pero la realidad es algo distinta. Mi hija a la que notaba el agua con los pies, se iba encogiendo hasta tenerlos casi a la altura de la cintura. No quería mojarse y cogía cada rebote cuando entraba en el agua!!!

No os preocupéis, eso sólo pasa las primeras veces. A la que vayan creciendo y se noten seguros, el problema no será meterlos sino sacarlos!

No pensaba hacer nunca un blog sobre bañeras pero hablando con otra madre con niño de la misma quinta que la mía, me surgió la idea. Aquí tenéis algunos consejillos sobre los pro y contras que veo a las bañeras más típicas que encontramos en las tiendas. Y sobre todo, a la hora de escoger un modelo, no solo penséis en lo práctico que es, sino también en donde la vais a meter y cuanto tiempo queréis que os dure. Y recordad que no es lo mismo bañar a un bebe que no se mueve que a un niño de 1 año que le encanta jugar con el agua y dejar el suelo perdido.

- hay bañeras que tienen por un lado hamaquita (a la derecha), para los primeros meses, que no saben estar sentaditos. Y por el otro lado (izda.) pueden estar sentados y jugando un poquito.  Estas me gustan porqué cuando ya son un poco más mayores, lo puedes tener sentadito en un lado y cuando toca lavar la cabeza, que se enfadan un montón, pues lo tumbamos en la parte de la hamaquita y listo. Pero encuentro que a la que crece un poco el niño... no cabe en ese mini espacio. Me sobra la bajada de la hamaquita.

- otro modelo es la bañera a secas, como la anterior pero sin la hamaquita incorporada. En este caso, la hemos de comprar aparte (las he visto en forma de osos) para meter dentro de la bañera y aguantarla con ventosas. Así al principio utilizas las dos partes pero cuando ya se aguanta sentadito, pues quitamos la hamaquita y ya tenemos todo un espacio para jugar.

- Bañera- cambiador plegable. Este modelo, si se tiene espacio en casa, ya sea en la habitación del bebe o el baño, va muy bien. Lo he usado y es muy práctico. Si lo dejas abierto, puedes tener en las bandejitas de la bañera el jabón, la esponja, el termómetro,...

            Si lo montáis en la habitación del bebe, podéis ponerla cerca de un estante con todas las cositas que necesitareis a la hora de cambiarlo. El gran problema igual es llenarla, sobre todo si no tenéis cerca un teléfono de ducha. Si tenéis que ir con un cubo de agua caliente por casa, igual se derrama un poco en el suelo. O si tenéis que llevaros el mueble de excursión hasta el baño para llenarlo,... Y ya no hablamos de si se hace pipi o caca dentro. Entonces toda el agua queda inservible y hemos de llenarla de nuevo. Otra ventaja que tiene es que cuando acabas de bañar al niño, lo coges con una mano bien tapadito con una toalla y con la otra cierras la bañera para convertirla en cambiador. Cuando luego acabemos con el bebe, ya tendremos tiempo de vaciar la bañera y recogerlo todo. Este tipo de bañeras vienen con un tubito que ayuda a vaciar la bañera por ejemplo recogiendo el agua en un cubo.

            Otra opción es tenerla en el baño. Si tenéis un baño grande, no hay problema, la podéis dejar abierta y intentar que el tubo llegue a la bañera para vaciarla. Pero si la tenéis que dejar allí cerrada por falta de espacio, no os recomiendo este modelo ya que cada vez que toque baño, primero tendréis que llenar, no solo el agua, sino la bandejita con todo lo que podéis necesitar después a la hora de usarla de cambiador, si es que no tenéis otro cambiador en la habitación y tenéis claro que esta bañera solo la queréis usar como bañera.

- Existe otro tipo de bañera-cambiador, que incluso puede ir a juego con la habitación. No lo he probado, solo he oído opiniones de otras madres. La diferencia con el modelo anterior es que no tiene patas plegables, por tanto se queda en la habitación del bebe siempre. Ventajas e inconvenientes, iguales que en el punto anterior. Otra ventaja es que cuando acabe la etapa de bañera, ésta se puede quitar y te queda una cómoda para las cositas del niño. Y la gran desventaja es que como no la seques bien o un día tengas algún problema, todo el mueble quedará inservible. Por eso la descartamos. No es tan fácil que no te caiga agua encima de la madera cuando el niño no para de chapotear cuando juega con sus patitos.

- Mi recomendación en caso de poco espacio: comprar una bañera, una hamaquita y unas patas plegables. Las patas se pueden guardar detrás de la puerta del baño. Y la bañera con la hamaquita, dentro del plato de ducha o bañera. La ventaja en comparación al sistema anterior es que la colocaremos encima de la taza del wc y así el agua irá cayendo aquí directamente. Si queremos que se bañe, dejamos el agujero cerrado y listos. 

- existen otros modelos de bañera, en forma de útero materno, en tubo,... pero no acabaron de convencerme.

Por último, no olvidéis comprar un termómetro para controlar la temperatura del agua. Y si tiene forma de juguete, mejor para los peques!

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